La Joven Orquesta celebra su mayoría de edad con la obra del maestro ruso y las ‘10 melodías vascas’ de Guridi
MARTA ESNAOLA AINARA GARCIA – Sábado, 11 de Julio de 2015 Enlace a la noticia

Unos jóvenes violinistas ensayan en el primer día del encuentro de la Joven Orquesta de Euskal Herria (EGO) en Eibar.
EIBAR – La Joven Orquesta de Euskal Herria (EGO) se hace mayor de edad y lo celebrará con un encuentro de músicos repleto de aniversarios. La Gazte Orkestra se reúne desde ayer en Eibar para preparar su gira de la temporada de verano: por un lado, interpretaránLas 10 melodías vascas de Guridi, que cumple su 75º aniversario; por otro, celebrarán los 150 años desde el nacimiento de Tchaikovsky con su sinfonía número 6, conocida como Patética. El público podrá disfrutar de estas piezas el día 19 en el palacio Euskalduna de Bilbao, el 20 en el Auditorium Itsas Etxea de Hondarribia, el 21 en el teatro Victoria Eugenia de Donostia y el 22 en el teatro Principal de Vitoria.
El director de la agrupación, Juan José Ocón, se encargó ayer de describir el programa que están preparando. Alabó la música de Jesús Guridi, y señaló que Las 10 melodías vascas, pieza que han estudiado los 74 jóvenes músicos de entre 16 y 26 años que conforman en esta ocasión la EGO, está “llena de impresionismo” y es muy “transparente”. “Es una obra muy difícil en la que nadie puede fallar, porque se advierte todo”, señaló Ocón. Además, agregó que es una composición “con una instrumentación muy densa y con muchos colores”.
Por otro lado, el encargado de llevar la batuta de la EGO declaró que la sinfonía número 6 de Tchaikovsky, Patética, es la obra que todos los músicos quieren tocar. “Consigue que se nos pongan los pelos de punta”, confesó. Además, subrayó que los solos que tiene son un buen entrenamiento para los jóvenes músicos, ya que son fragmentos que piden tocar en muchas audiciones.
EL ENCUENTRO EN EIBAR Para esta temporada de verano, ha acudido a Eibar una gran variedad de instrumentos: aparte de los de cuerda, que no suelen faltar, también hay percusión, viento madera y viento metal, un arpa y una celesta -una especie de piano con un sonido más cercano al del xilófono-. Entre todos, intentarán estar a la altura en los conciertos de celebración y no pararán de ensayar hasta los días de los recitales. Las primeras cuatro jornadas, cada instrumento está ensayando con un profesor en un aula diferente. “Durante este tiempo, los músicos solo pueden ver la obra a vista de pájaro”, apuntó Ocón. Después, el director reúne a toda la orquesta para los tuttis, donde ensayan todos juntos en el teatro. “Tenemos mucha suerte, porque en este lugar hay un sonido muy seco, sin reverberación, algo muy importante para mí durante los ensayos”, continuó.
Los jóvenes intérpretes acudieron al encuentro con muchas ganas de aprender. Julia Gil, una violinista de 18 años, se acercó a Eibar desde Soria. “Es la primera vez que vengo y veo que la gente ha venido muy dispuesta a trabajar y con muchas ganas”, afirmó, por lo que se siente con energía para afrontar estos días de trabajo. También es la primera vez para las logroñesas Aitana Rosón y Ana Lasaosa, de 19 y 17 años, respectivamente. Ambas aseguraron tener muchas ganas de afrontar una nueva experiencia y hacer un intensivo con dos piezas de semejante nivel. “Tchaikovsky siempre me ha gustado mucho y me apetece tocar esta sinfonía que ya conocía de antes”, señala Rosón, quien admitió que no había escuchado la pieza de Guridi de antes, aunque le “parece muy bonita y muy rápida”.
Por otro lado, Naia, una percusionista elgoibartarra de 23 años, se mostró especialmente ilusionada por poder tocar Las 10 melodías vascas. “Es una forma de conocer mejor el patrimonio musical que tenemos aquí”, señaló la joven, que ya ha podido asistir al encuentro en más ocasiones. Su compañero Manu, un donostiarra de 19 años, también se mostraba muy contento con el repertorio, pero subrayó la compañía que tenía en este encuentro. “Es muy enriquecedor reunirme con gente del mundo de la música, aquí estamos personas que nos queremos dedicar a lo mismo y que además compartimos estudios”, declaró.
18 AÑOS DE LA EGO Aunque en esta ocasión participen en la EGO 74 músicos, ya han pasado por sus filas cerca de 1.200 jóvenes durante los 18 años que han transcurrido desde la fundación de la orquesta. “Hemos ofrecido alrededor de 150 conciertos, y más de 120.000 personas nos han visto actuar”, calculó el director de la formación.
Además, recordó que durante estos días, la Gazte Orkestra realizará audiciones a un total de 20 músicos, a quienes ofrecerá un programa de prácticas orquestales en la Orquesta Sinfónica de Euskadi (OSE), por lo que se les podrá ver en la próxima temporada de abono de la OSE.